Rostros de AlVelAl: Arantza Ilarduya de Diego
Amante de las flores y la bondad del campo, se siente como una niña con zapatos nuevos en AlVelAl.

Los antepasados de Arantza son jardineros, desde pequeña tuvo la posibilidad de estar relacionada con el campo. Profesión de su padre y abuelo que, de manera directa e indirecta eso le ha hecho meya en su actitud ante la vida. Estudió lo que antes era capataz forestal, que ahora es Técnico Superior en Gestión y Organización de los Recursos Naturales y Paisajísticos. Por diversos motivos se quedó con la empresa familiar, pero después de unos años decidió echar el cierre y venirse para la comarca de los Vélez en Almería, en concreto a Velez- Rubio, lugar del que se enamoró al visitarlo. "Necesitaba tener vida" dice Arantza, el ritmo de su vida pasada no le permitia tener tiempo y decidió comenzar una nueva vida. A través de uno de sus amigos se enteró sobre la actividad de un Agrocafé promovido por AlVelAl, evento donde diferentes agricultores se reunén y comparten sus experiencias agrícolas con el fin de intercambiar conocimientos y aunar fuerzas. Ese Agrocafé inspiró y motivó a Arantza, “esa idea de sostenibilidad, de pensar en el futuro, de que hay algo más de lo marcado convencional” le llenó de alegría, al ver que conectaba con personas afines a ella y existían proyectos como este. Así empezó su amor por la Asociación y comenzó a conocerla más profundamente.
Poco a poco asistía a los diferentes talleres que ofrece la AlVelAl, para Arantza era cuestión de tiempo tener una relación mas estrecha con la Asociacion, con el devenir del tiempo terminó obteniendo el cargo de apoyo a la asesoría técnica agrícola. Comparte que "se siente como una niña con zapatos nuevos, con mucha emoción, con proceso de asimilar pero muy ilusionada". La idea de Arantza es poderle facilitar al agriculor otro tipo de manejo de la tierra mas ligada a prácticas regenerativas, otro tipo de acciones que quizás el agricultor no se había planteado. Para ella es muy importante “no sólo pensar en la produccón sino en el mañana, para los que vienen detrás”. AlVelAl le supone “inspiración, admiración por todo el trabajo y futuro”. Se remonta al Agrocafé y ve la ilusion de intentarlo, ha podido conocer a gente que piensa como ella y se siente con más fuerza. Y comparte que "los pequeños gestos mueven el mundo, para mi AlVelAl es ese pequeño gesto". Del futuro, Arancha espera “el contagio positivo de AlVelAl, para poder mostrar a la sociedad que es posible y factible otra relación con nuestro entorno, en definitiva, contagiar una visión "regeneradora de la vida.